Solo para una
La mentira, ante todo
la mentira. Se presentan paisajes de atardeceres calientes, donde el roce es lo
que espera para la noche, pero después, en la vida real, ese gato de ojos azules
se convierte en una pantera que cuida de los suyos, solo de los suyos, porque
en su corazón no hay espacio para más. Él se sienta solo, hay una sola mujer tras
él, a quien él rinde pleitesía, pero es todo, detrás de eso no hay más. Es un
engaño, él es una pantalla que solo pispilea cuando conviene, por lo demás se
mantiene apagada y en estricta vigilancia.
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